miércoles, 25 de mayo de 2011

Contra Keiko/ Carlos Reyna

¿Es Keiko Fujimori solamente la hija biológica de Alberto Fujimori, con su propio rumbo en política? Ni hablar. Sin ser idéntica a él, Keiko es la discípula y la continuadora de su padre en todo lo que son los juegos del poder.

Keiko nació a la política moldeada por su progenitor. Él le dio su primer papel público como primera dama, y de él tomó varias de las tesis que forman el ideario elemental del fujimorismo.

Así, ella piensa que el golpe de Estado de 1992 estuvo justificado en aras del orden. Cree que su papá no sabía nada de los crímenes orquestados por Montesinos. Piensa que es inocente, que su condena es injusta y que debe ser liberado.

También del padre recibió su condición de apoderada del fujimorismo. Él le traspasó los operadores, las redes, las complicidades y las prácticas políticas que conforman su movimiento. Y no la hubiera hecho candidata sin verificar que ya era una dócil y aplicada pupila política.

También ahora, como antes el padre, Keiko carece de ideas, de intelectuales y de programa. Le basta traficar con las necesidades de los pobres y el pánico de las clases medias. Con usar a su favor el recurrente egoísmo de las clases altas y la desinformación practicada por la mayoría de los grandes medios. Es la misma moral.

No sé si una Keiko gobernante sumiría al Perú en otra dictadura. A veces, eso ni hace falta con una democracia tan oligárquica como la que tenemos. Pero, si gana Keiko, esa será la señal que relanzará a tantos agentes de corrupción, autoritarismo y sobreexplotación que casi ni fueron tocados después del 2000.

Si gana Keiko, será la derrota póstuma de la marcha de los cuatro suyos, la más grande lucha democrática de la historia peruana. Y los que gracias a ella fueron sancionados volverán como hombres o mujeres de Estado, algunos con toda pompa y otros desde las sombras. Entre ellos, Alberto Fujimori.

Sería la derrota de los jóvenes sin partido que ahora, auténticos demócratas, desde múltiples grupos en muchas universidades y barrios, dan todo de sí para evitarle esa vergüenza al Perú. Y si pierde Keiko, acaso será porque estos muchachos marcaron la diferencia.

Por todo esto, yo votaré contra Keiko Fujimori y marcaré Ollanta Humala. Por hoy prefiero esta opción, de lejos.

¿Suspensión del pensamiento crítico de izquierda por elecciones?/ Alvaro Campana


El Perú se debate en un momento político difícil: estaríamos ad portas del retorno de la versión más “repugnante” de la derecha al gobierno a través del fujimorismo. Frente a ello se plantea la unidad en torno a Ollanta Humala como la opción de salvar la democracia. Pero lo que no se dice es que, aún así, la derecha está ganando porque a “amansado” (Cotler dixit) a Humala quien prácticamente ha capitulado frente a la derecha más liberal (política) para obtener su apoyo y se consolida nuevamente el binomio democracia-mercado como fundamento del discurso hegemónico y su próximo gobierno como opción de gobernabilidad.

Es decir la derecha tiene la opción de escoger entre su mal mayor (alentada por su terror a lo plebeyo y a cualquier apertura al cambio, que representa Humala) porque lo que ofrece un gobierno de K. Fujimori es una mayor polarización social; o su mal menor que es el propio Humala. Nosotros no tenemos otra que apostar por una opción, Humala, que ha reconfigurado su propuesta a un compromiso por gestionar de manera más honesta y con mayor solidaridad el neoliberalismo.

Se ha dicho que no hay una correlación político electoral favorable, y es cierto. Un tercio del electorado del país es el voto duro de Humala, el voto descontento y antineoliberal que se muestra en la especialmente en el sur del Perú. Mientras, K. Fujimori se apoya también en su tercio electoral duro con sectores que fueron objeto de las políticas focalizadas y clientelares, los sectores más regresivos y corruptos de la estructura de poder (iglesia católica conservadora, varios empresarios y tecnócratas, sectores de las fuerzas armadas) y también sectores autoritarios y conservadores de las clases medias y populares. En medio, un voto que se divide entre ambos pero que es el que o quiere más libre mercado, racista y de clase media y que apoyara a Fujimori; y del otro, un sector más liberal, que apostará en parte por Humala aunque con muchas reticencias, y por un continuismo pero con mejoras y ajustes y que tiene fuertes resistencias al fujimorismo.

Por ello, y de hecho así se ha sostenido, el cambiar el programa de la “Gran Transformación” por el de la “Concertación Democrática”, expresaría que no es posible hablar de una correlación social, ni electoral favorable a la "gran trasnformación" sino que es necesario concertar con otros sectores.

De esta manera la discusión no gira ya en torno a una agenda antineoliberal, o que cuestione de manera significativa la estructura de poder instaurada precisamente a partir del gobierno fujimorista. La discusión gira en torno a las calidades morales de los fujimoristas (ya no los neoliberales) y la violación a los derechos humanos en el gobierno de Alberto Fujimori. El debate se desarrolla fundamentalmente por derechas desde una perspectiva moralista y/o pragmática. Es cierto que en la “carrera electoral” la propia candidata del fujimorismo ha hecho declaraciones favorables a impuestos a las sobreganancias y que mostraría un cambio de subjetividad respecto de las necesidades del país.Sin embargo, eso nos suena más al cambio responsable alanista que ya sabemos fue y es una farsa.

El repliegue es tal que hasta Álvaro Vargas Llosa, uno de los escritores del “Perfecto Idiota latinoamericano” libro en el que según él se burla de la cultura de izquierdas en América Latina, y de quien no discutimos su honestidad o bondad, aparece hoy como uno de los principales voceros para terminar de “adecentar” la candidatura de Humala y decantar a un sector indeciso de la población para lograr su triunfo en las elecciones. así, en el camino aceptamos de contrabando ideológico una serie de afirmaciones que parecen cimentar aún más el sentido común neoliberal, en su versión demoliberal. Su lectura conservadora sobre los procesos de cambio en América Latina, su disociación del neoliberalismo con las dictaduras, la intocabilidad de la constitución y los intereses de los inversionistas, entre otros son ejemplo de ello.

Este panorama, nos da una radiografía de en qué está la sociedad peruana y cómo a partir de esa situación podemos construir un proyecto de izquierda sostenido en una mayoría social, política y electoral. Pero también, aquí nos concentramos en esto, nos obliga a revisar nuestras propias responsabilidades y limitaciones discursivas y prácticas como izquierda en el momento actual. Muchos compañeros queridos nos han dicho: “ya déjense de decir sólo No a Keiko, y digan SI a Humala”, sin más. No han faltado jalones de orejas porque los grandes grupos de poder comunicacional nos tienen tan de rodillas, que hay que ser cautos hasta con hacer política en la calle, "no nos vaya a quitar puntos", permitiendose así que se criminalice aún más la protesta social en el espacio público.

Y nos preguntamos entonces ¿ha entrado en suspenso el pensamiento crítico de izquierda? ¿Tenemos algo que decir o qué hacer respecto de cómo está configurado el poder en el Perú en la coyuntura electoral? ¿Tenemos algún proyecto desde el cuál construir/disputar el poder, que en este contexto nos permita debatir posiciones con la derecha fascista y con la derecha liberal? Desde la izquierda, o lo que queda de ella, no estamos empleando la lógica “alianza y lucha” en la coyuntura actual y mucho menos estamos planteando tampoco una orientación programática que nos permita pelearla desde la izquierda y configurar un actor social que levante un proyecto alternativo. Debe ser que definitivamente nuestra izquierda es tan “arcaica” o “moderna” que se ha quedado sin argumentos más allá de lo testimonial, lo moral o los argumentos tecnocráticos aprendidos en tantos cursos y proyectos en las ongs auspiciados por el Banco Mundial.

Creemos que, sin embargo, y a pesar de los chantajes de la derecha, de los sermones en el propio campo para medir las consecuencias de lo que hacemos en la calculadora electoral, o de la resignación a la política expropiada que se expresa y ejerce sólo en los gestos de los candidatos y los “políticos”, en las nuevas generaciones se empiezan a desplegar un conjunto de iniciativas (discursivas y prácticas) que nos pueden ayudar a parir una izquierda que esté a la altura de los cambios estructurales de los que tanto se habla. En la “cruzada antifujimorista” aparecen así un conjunto de subjetividades, sensibilidades y demandas que nos pueden permitir construir una nueva izquierda.

¿Por dónde podría ir esta emergencia y hacia donde podría desembocar? Se nos ocurren las opciones siguientes que presentamos en forma de preguntas: ¿nos estamos dando cuenta por fin que la política no puede ni debe restringirse a los espacios institucionales o meramente del espectáculo? ¿Será que en la lucha por los derechos humanos –una de las más reivindicadas-estamos reconociendo que hay demandas populares con las cuales empatar sin que suenen a asuntos de unas cuantas ongs (que además las despolitizan) y que cuestionan el orden neoliberal e incluso no tienen más remedio que pensarse desde una perspectiva anticapitalista?[1] ¿Será que estamos sintiendo la urgencia de generar nuestros espacios de poder desde abajo para cambiar las correlaciones de fuerza a partir de la necesidad de tener nuestros propios medios de expresión, fortalecer nuestras organizaciones, impulsar nuestros propios emprendimientos económicos, sociales y culturales?

¿Será que hallaremos nuestra distinción respecto del nacionalismo en que nosotros creemos en la democracia radical, que queremos ir más allá del desarrollismo nacionalista capitalista, que consideramos que hay cuestionamientos de alcance civilizatorio respecto nuestra relación con la naturaleza y con respecto a la diversidad y que nos parecen cantos de sirena los llamados a la “unidad nacional” anulando la política como ámbito de disputa de imaginarios y proyectos sociales antagónicos?

¿Será -finalmente- que hemos comprendido que así como idealizamos tanto lo “estatal” en la política, también hemos idealizado lo “molecular”, lo “micro” como espacio para hacer política y que necesitamos construir un poder social alternativo, pero también un proyecto político que pueda dotarse de una estrategia desde la cual disputar hegemonía en todas las esferas y ámbitos?

Hoy más que nunca no debemos suspender el pensamiento crítico, debemos ser más bien capaces de encontrarnos e ir, sobre la base de nuestras prácticas, construyendo una agenda desde abajo que nos permita intervenir desde la izquierda en este proceso y dar nacimiento a un proyecto político, social y cultural de izquierdas al calor de la batalla electoral, con proyecciones para después. Con esto debemos contribuir a que la mafia fascista del fujimorismo no llegue al gobierno, pero con la claridad de que estamos bastante lejos de materializar los cambios estructurales que tanto se reclama, y que necesitamos un proyecto de izquierdas para lograrlo.



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[1] Por ejemplo la memoria, con quienes fueron afectados por el conflicto armado; la libertad de expresión como algo que no puede restringirse sólo a los grandes medios y a los oligopolios mediáticos; los derechos respecto del “medioambiente” con los “conflictos socioambientales” cada vez mayores y la emergencia de actores indígenas que reivindican la diversidad cultural; la equidad de género y la diversidad sexual que confronta contra el conservadurismo de quienes controlan el gobierno y están asociados a la iglesia.; el derecho al trabajo digno cada vez más confrontado con una reproducción de la precariedad laboral en los trabajadores jóvenes y la ausencia de formas de protección social para los más mayores. Finalmente, ¿será que a partir de estos será posible armar una plataforma para desprivatizar el Estado, politizar nuestras prácticas y resignificar la democracia como algo que no es sólo una cosa abstracta que se materializa cada 5 años?

viernes, 20 de mayo de 2011

Solidaridad con Nury García: Basta de amenazas a quienes defienden los DDHH y el territorio de las comunidades del Perú.

Solidaridad con Nury Garcia: Basta de amenazas a los activistas que defienden los Derechos Humanos y el territorio de las comunidades y de los pueblos del Perú


Los que suscribimos ciudadanos, activistas, profesionales e integrantes de organizaciones sociales, etc. queremos expresar nuestra mayor solidaridad con Nury García Córdoba quien viene siendo acosaba con amenazas contra su vida e integridad personal. Nury Garcia, es una reconocida activista social en defensa de los derechos de los niños trabajadores, de los derechos humanos, del territorio y ambiente. Conduce la asociación "Casa Amigo" en la provincia de Sánchez Carrión, en la región de la Libertad desde hace más de 15 años. Como activista social, forma parte del Movimiento Ciudadano Para que no se Repita, la red Muqui (Minería y Ambiente), el Movimiento por el Poder Popular (MPP), así como de redes de educación popular en el país y a nivel internacional.

Las amenazas recibidas por Nury, se refieren justamente a sus actividades sociales y ciudadanas, en particular que se abstenga de apoyar a los procesos ordenamiento territorial participativo en el cual participan organizaciones sociales como las rondas urbanas y campesinas y la municipalidad provincial de Sánchez Carrión. Cabe resaltar que la provincia de Sánchez Carrión, como ocurre con otras muchísimas zonas y pueblos del país, tiene más del 80 % de su territorio concesionado para actividades mineras. Como consecuencia de este proceso de concesiones indiscriminado, sin planificación social y ambiental y sin la consulta de las comunidades y poblaciones, en la provincia se sufren los efectos de la contaminación del territorio, agua, aire, etc. así como se producen conflictos sociales entre comunidades, empresas mineras y minería informal. En este sentido, exigimos a las autoridades y funcionarios públicos correspondientes (Poder Judicial, Ministerio del Interior, Defensoría del Pueblo, etc.) que investiguen estas graves amenazas y se le presten a Nury García todas las garantías del caso para su integridad y el normal desenvolvimiento de sus actividades ciudadanas. Exigimos también, en esta coyuntura electoral, a los candidatos y sus grupos, un posicionamiento sobre este caso y sobre las situaciones de represión y violencia contra las comunidades y poblaciones que ejercen su derecho a expresar su rechazo a la imposición de proyectos de industrias extractivas que afectan sus territorios.

Nuestro país, requiere de iniciativas de desarrollo sostenible que respeten los derechos humanos, el derecho de todos a un ambiente sano y la decisión de los pueblos del tipo de desarrollo que quieren impulsar. El trabajo de Nury García y de otros activistas se orienta a ello. Ningún sector económico o político puede imponer por la fuerza y con amenazas una actividad extractiva o de cualquier tipo. Hacemos un llamamiento para que todos los sectores sociales y económicos presentes en la provincia hagan un deslinden y cuestionen las amenazas este incidente. Por último, queremos expresar que Nury cuenta con la solidaridad activa de sus amigos y activistas de los diversos movimientos a los que pertenece, quienes nos mantenemos vigilantes y prestos para intervenir en su defensa y en defensa de los derechos que ella promueve.

Huamachuco y Lima, 19 de Mayo del 2011

Agradecemos su difusión y adhesión

miércoles, 18 de mayo de 2011

Entrevista a Carlos Iván Degregori: La gestación de Arguedas

La Gestación de Arguedas: Entrevista a Carlos Iván Degregori from Grazia Pineda on Vimeo.


Entrevista realizada por Centro de Estudiantes de Antropología de la Universidad de San Marcos. Ponemos esta nota como un homenaje a Carlos Iván quien buscó entender este nuestro país tan diverso, atravesado por esos hondos y mortales desencuentros, y siempre preocupado por contribuir a construir mejores formas de convivencia que no puede sino construirse en base a la verdad, la justicia, la libertad, la democracia, la dignidad humana. Al margen de sus calidades intelectuales Carlos Iván fue sobre todo un gran ser humano. Le vas a hacer falta a este nuestro país, le vas a hacer falta a este nuestro mundo ahora tan incierto.

martes, 17 de mayo de 2011

Piquetes contra el retorno del fujimontesinismo ¡construyendo poder popular!







Autonomía es transformación, el clientelaje es dominación y más capitalismo!/ Juan Carlos Giles

Asi vamos re-conociendo algo que sabemos desde hace mucho: la politica o la actuación pública es vista con recelo por mucha gente. En Huamachuco un rondero hace poco explicaba: "cuando hablamos de politica nuestras bases dicen politica es de puercos, seguro ya quieres ser regidor o alcalde". Y claro, meterse en política es para obtener ventajas personales. Politica por amor a la camiseta?, política por gusto?. Si, nosotros lo hacemos por gusto!. Pero vastísimos sectores de nuestro pueblo, simplemente no creen en el sujeto que se mueve, que trabaja, que impulsa una causa porque la cree justa o expresa una motivación genuina.

En esa linea, cualquiera que compre, regale o pague a otros para hacer politica merece nuestro mayor RECHAZO. El clientelaje destroza la confianza en la acción autónoma de la gente. Así reforzamos los viejos sentidos comunes de : "Es ladrón pero hace obra", "para cojudos los bomberos", "politico corrupto tiene derecho a recuperar su inversión", "¿que nos van a regalar ah?", "acaso la politica te da de comer", "todos son ladrones, todos entrar a robar", etc.

Por tanto, el CLIENTELAJE es de DERECHA. Lamentablemente hemos visto desde hace muchos años e incluso este FIN DE SEMANA a grupos que se asumen de izquierda, USANDO métodos de clientelaje politico más descarnado y mas repulsivo. Pedimos de modo firme y "sin purismos"; que estos grupos se ABSTENGAN de proseguir con esta practicas

Por la senda del clientelaje y de otros vicios de la política, ésta  se vuelve un territorio densamente habitado por mafiosos, tecnocratas y politicos profesionales, curtidos en el pagmatismo. Estos politicos aceptan como inevitables "N" concesiones al sistema, a la politica del cinismo, de la resignación y de todos los NO SE PUEDE y NORMAL NOMAS, Así FUE, Así ES y Así SERÁ. En el fondo, la resignación de algunos izquierdistas que se asumen modernos y responsables revela una falta de imaginación transformadora, que aporta a la sensación de que no existe un horizonte de vida y practicas politicas alternativas al actual orden capitalista.

Nosotros, poco a poco nos la jugamos con otros compañeros que ponen en sus pies y en sus manos de politicos artesanos nuestras intuiciones. Estos fines de semanas los piqueteros ensayamos caminos con nuestro pueblo y recuperamos practicas fundamentales para hacer "otra politica": Si los grandes medios son del capitalismo, las calles son nuestras, si el capitalismo y quienes lo reproducen usan el clientelaje, nosotros sabemos que el pueblo trabajador hace realidad la autogestión con las "chanchitas" , etc.  Resistir es crear... En esto creemos y en esto nos venimos jugamos.

lunes, 16 de mayo de 2011

Quién pone la agenda/ Carlos Reyna

Faltando menos de un mes para el día D de la segunda vuelta, las encuestas muestran que Keiko Fujimori habría remontado la ventaja que inicialmente tuvo Ollanta Humala.Tengo la impresión de que las encuestadoras siguen teniendo un sesgo más tirado hacia lo urbano. Dado que el bastión de Ollanta es el aún subestimado mundo rural, es posible que todavía conserve alguna ventaja.  Sin embargo, es harto verosímil que Keiko acortó distancias

¿Por qué ha ocurrido esto? Porque la coalición de intereses que combate a Ollanta,  luego de un comienzo vacilante, superó sus pudores, se alineó con Keiko, encontró la agenda de temas para arrinconar al nacionalista y comenzaron a imponerla desde los medios que controlan, que son casi todos.
Pero todo eso era absolutamente esperable y casi natural. A partir de extraer fragmentos de su Plan de Gobierno, han puesto un conjunto de temas contra Humala. Los cargos que le hacen pueden ser más o menos ficticios, pero se resumen en dos grandes temas: el candidato amenaza el crecimiento económico, y es un peligro para la libertad de prensa y a la democracia.

El problema con el campo de Humala es que, a pesar de que fue el primero en tomar la iniciativa y en recibir apoyos desde otros actores políticos, después se ha dejado absorber por la agenda de sus adversarios. Ha limitado sus mensajes a un cansino y ambiguo levantamiento de los cargos contra él. Perdió iniciativa, replegó sus propuestas, diluyó su propia agenda.

Asegurar que continuará el “modelo económico”, prometer que no tocará ni una pestaña del actual oligopolio mediático, reclutar técnicos de centro, ofrecer que las sobreganancias mineras serán tocadas moderadamente, todo eso puede, quizás, aplacar la ira de adversarios que no dejarán de serlo.
Pero al vasto electorado popular y de las clases medias se llega más con mensajes detallados y vibrantes sobre los precios de las medicinas, del gas, de los alimentos, de la educación, del crédito para los productores, de los servicios de telefonía, luz y agua y sobre el nivel del salario y el acceso al trabajo.
Decía un conocido encuestador que en el Perú el voto tiene una lógica social y económica. Olvidar eso, y dejarse envolver por la agenda adversaria, no es buen camino hacia el día D. 

jueves, 5 de mayo de 2011

Saber popular es poder popular/ Juan Carlos Giles

Entre las múltiples luchas que tenemos que librar, la afirmación del saber popular y la construcción colectiva es clave. En la construcción programática, en la recuperación y en disputa por la memoria de las luchas y los sentidos comunes, en los procesos de gestión local, fortalecimiento de organizaciones populares, en el arte y la comunicación popular, etc. una tarea política estratégica consiste en subrayar y poner en práctica iniciativas de REFLEXIÓN EN LA ACCIÓN COLECTIVA que recrea potentes SABERES POPULARES.

SABER POPULAR es PODER POPULAR. Este es un criterio fundamental para diferenciar la nueva radicalidad socialista y de izquierdas, de otras múltiples formas de conservadurismo y elitismo que vamos observando por todos lados. A pesar que sabemos que uno de nuestros objetivos es enfrentar al fascismo social y al continuismo neoliberal en esta coyuntura electoral representada por la K, no pueden pasar inadvertidas expresiones muy reveladoras de elitismo como las sostenidas por S. López al referirse al plan de Gana Perú- Humala : "Todos deberían saber que el programa ha sido elaborado por intelectuales, técnicos, y profesionales de alto nivel, formados en las mejores universidades del Perú y el extranjero". Las ausencias de los múltiples sujetos populares gritan muy fuerte y reaccionariamente en esta declaración. Por ello, cuando pensemos en una lucha concreta podemos preguntarnos si este proceso potencia o limita la producción de saberes, la toma de decisiones y las INFINITAS formas de participación de los amplios sectores populares. Se pude y debe problematizar, cuestionar, enriquecer, etc. la participación y saberes populares pero NUNCA IGNORARLOS, invisibilizarlos o subestimarlos. Así y para bien o mal, desde una perspectiva más amplia de la política sostenemos con nuestro entrañable Antonio Gramsci, a todo pulmón: TODO SOMOS FILOSOFOS!!

Juan Carlos Giles


dialogo de saberes, ecologia de saberes, analisis de relaciones de poder entre saberes y lenguajes y reconocimiento de las posiciones de cada sujeto personal o colectivo que los produce. Habría que preguntarse con que criterio un saber se a ...sume experto en relación a otro?. Ayuda tb reconocer la amplitiud de zonas difusas entre los diveresos saberes. El riesgo de la especialización y de los saberes expertos paradojicamete termina siendo la autoreferencia y la alienacion. La traducción es una opcion cuando los sujetos por X o Y circunatancia producen sin o con baja interacción con el "otro" pero cuando los sujetos "se tocan" se abren "N" tipo de relaciones entre los saberes: alienación? diglosia?, hegemonía, dialogo?, ¿comunicacion tipo orquesta sinfonica o banda de jazz? asamblea? etc.