En las últimas semanas el Congreso de la República viene siendo escenario de diversas manifestaciones de vulneración a los derechos fundamentales de las mujeres, adolescentes y personas TLGB.
Las Comisiones de Mujer y Familia y de Justicia y Derechos Humanos del congreso han sido coptados por lobbys católicos, evangélicos y fujimoristas, que buscan imponer sus creencias religiosas y su práctica histórica contraria a los derechos de las mujeres y personas TLGB, en normas de especial interés en la vida social nacional. Estos grupos antiderechos son liderados por el pastor evangélico, ahora congresista, Julio Rosas; Martha Chavez; Aurelia Tan; Maria del Pilar Cordero y Juan Díaz Dios.
La Comisión de la Mujer y la Familia, a través de dictamen al proyecto del “Nuevo Código de los niños, niñas y adolescentes”, pretende:
a) vulnerar los derechos de las mujeres y ponerlos en menor rango que los que corresponden a los fetos. Es decir, los derechos del feto serían más importantes que los de las mujeres;
b) eliminar la titularidad de derechos sexuales y reproductivos de los y las adolescentes y eliminar la responsabilidad del Estado de impartir educación sexual a adolescentes.
Asimismo, la Comisión de Justicia y Derechos Humanos, decidió:
a)eliminar orientación sexual e identidad de género como categorías agravantes de las acciones criminales originadas por motivos de discriminación; y en tráfico legal,
b) incorporar fenómenos criminales inexistentes los cuales están destinados a perseguir las organizaciones que defienden los derechos humanos de las mujeres.
Exigimos, la vigencia inmediata del Estado laico y la no intromisión de los grupos antiderechos y fundamentalistas, que buscan imponer sus creencias religiosas a toda la población.
Rechazamos la campaña sistemática de vulneración de derechos que desde el fujimorismo conservador y machista se viene sosteniendo. Quienes estarían buscando repetir la nefasta historia de agresión a las mujeres de los años 90, reflejadas en las esterilizaciones forzadas, en la negación de sus derechos sexuales y reproductivos.
Llamamos a la acción a los grupos de izquierda a movilizarse y seguir denunciando los sistemas de opresión de las cuales históricamente las mujeres y población TLGB han sido sujetos.
Nunca más el cuerpo de las mujeres como campo de batalla
No hay comentarios:
Publicar un comentario